Después de cinco años y medio ocupando el cargo de ministro de Cultura en el gobierno de Lula, Gilberto Gil finalmente decidió renunciar y volver a dedicarse de lleno a la música. A los 66, el gran ícono de la música popular brasileña e histórico responsable (junto con Caetano Veloso) del movimiento conocido como tropicalismo, editó Banda larga cordel, su primer disco de canciones propias -e inéditas- en 11 años y volvió a las giras. El disco, que viene de presentar en Río y Nueva York y va a mostrar en Montevideo en combinación con temas clásicos, contiene ritmos de samba, reggae y forró y vuelve a manifestar en las letras el interés de Gil por Internet y los avances de la tecnología en general. En ese sentido, este trabajo continúa la senda trazada por Parabolicamará, de 1992.La obra vincula, además, las nuevas formas de comunicación con la literatura de cordel, un género de poesía que versaba sobre noticias de actualidad y se difundía en forma oral y luego por medio de folletos unidos a través de una cuerda. El estilo tuvo gran repercusión en Brasil en el siglo XIX.
Por Fermín Solana Revista VAYVEN
Sáb 8, 21 hs. Teatro de Verano. Entradas de $ 320 a $ 1.025 en Red UTS
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